¿Para qué me dabas de beber
calmando mi sed,
si tu fuente no era mía?
¿Para qué me abrías
tus brazos calmando mi frio
si tu corazón no era para mí?
¿Para qué fingías cariño
si sabías que yo te amaba?
¿para qué me dejaste tener alas?
Pretendía cruzar mis sueños
y acariciarte en ellos,
pretendía viajar en el tiempo
para conocer el momento exacto
en el que me enamoré de tí.
¿Para qué me hiciste creer
que eras solo para mí?
YOLANDA BARRY.