evaprestes

Volviste, apenas

Te fuiste a la batalla, amigo,

y yo me fui contigo, acompañándote

Me fui con el pensamiento y la ternura

me fui con el afecto a la distancia

siguiendo tu sombra solitaria

rogando a Dios te diera fuerzas

para la afrontar la lucha.

Volviste silencioso y elusivo

distante, pensativo, ausente

me dijiste “usted, señora...”

Con un gesto, apenas saludaste

no me diste un beso siquiera

ni un contacto de tu mano helada.

Una mirada apenas, elusiva,

y un saludo breve y sin afecto

No me dijiste querida, amiga,

preciosa, compañera, amada...

me viste partir y no dijiste nada.