fernandocardonakaro

ESE JESUS

  

ESE JESÚS

  

Ese Jesús usado en los altares

Para hacer plata y endiosar al rico,

Y para ellos multiplica panes

Que no calman el hambre del mendigo,

 

Ese Jesús para el que piden mucho,

Para que mucho de a quien mucho da,

Y nada da a quien vive en bajos mundos

Y de su nada, nada puede dar.

 

Ese Jesús que expulsa a latigazos

Del atrio a vendedores ambulantes,

Para que no compitan con los galgos

Cuya riqueza ya es exorbitante.

 

Ese Jesús que con palabra extraña

Invita al pobre a mantenerse pobre,

A que en resignación mire el mañana

Esperando nacer de nuevo, noble.

 

Ese no es el Jesús que necesita

El pueblo que por siempre esperanzado

Sobrevive, fallece y resucita

Para seguir cargando de explotado

 

La cruz con la que, dice el doctrinero,

Abrirá de lo eterno los caminos

Por los que puro llegara a los cielos

Si cumple de los dioses los designios.

 

El Jesús para el pueblo necesario

No es el que inerte yace en ricos templos

Para resucitar año tras año

Y en rito absurdo ser de nuevo muerto.

 

El Jesús necesario para el pueblo

Es el que va con el trabajador

Y le dice al oído “nunca es bueno

Que mientras te diluyes en sudor,

 

Progresa, engorda y vive en el confort

Quien te hace trabajar por vil salario

Y funge de buen hombre y de señor

A expensas de tu ruina, proletario”.

 

El Jesús por el pueblo requerido

Es el que sube a pie montaña arriba

Y baja al llano y va a los caseríos

Y se unta de la sangre campesina,

 

Y le enseña al indígena y al negro,

Y al blanco y al mulato y al mestizo

Que no el color nos hace más o menos

Porque a todos iguales se nos hizo.

 

Es el tener o no tener la tierra,

Es el tener o no tener trabajo,

Lo que nos hunde en las malditas guerras

Que pelean y pierden los de abajo.

 

Por ello se requiere un Jesús bravo,

Guerrero de la paz y la hermandad,

Un Jesús que no quiera hombres esclavos,

Un Jesús que predique libertad.

 

Yo no quiero un Jesús escarnecido

Víctima de cordero alobunado,

Quiero un Jesús mostrándonos caminos,

Un Jesús no en la cruz, sino a caballo.

 

 

fernandocardonakaro