gaston campano

Noche ideal

Cuando la luna tendió

sus brazos sobre ese lecho,

pintádolo de dorado

el cielo blanco del techo.

esas sábanas rosadas

como olas en acecho

de esos cuerpos pintados

con sudor y muchos celos

ella mirando su cielo,

con unicornios al viento 

El entre río y volcanes

que se uniran en encuentros.

El jardín de ese Edén

con manzanos y serpientes,

tentaciones que ya llegan

anclándose entre las pieles,

Ella su piel dorada

la de él de oliva y placeres

Un temporal de quejidos,

una calma hecha vals

con suavidad y vaivenes,

siendo las aguas del río

salida de las vertientes

ella bajó adormecida

sus parpados color de mieles,

él acunó a la amada

su sueño como de reyes,

ella, la reina cansada,

eran los cuerpos inertes.

La noche cogió sus sombras,

retirándose sin leyes

dejándo a la pareja

con alegría en sus pieles.

El bajó la colina

donde gozó de quereres

saciando,su amor dormido

entre besos y placeres.