Voy a amarte así,
sin prisas, voy a saborear cada beso
que de tus labios reciba.
Voy a amarte como si ese momento
fuera el último instante de nuestras vidas.
Voy a amarte así,
prendiéndome a tu cuerpo, piel con piel,
deslizando mis dedos inquietos,
hacedores de caricias infinitas.
Voy a amarte así,
desnuda ante tus ojos tenaces,
ante tus brazos firmes,
que me envuelven en sensaciones indescriptibles.
Voy a amarte así,
en el silencio de mi habitación,
en la suavidad de mis sábanas de seda,
como si fueran los pétalos de una flor.
Voy a amarte como jamás te han amado.
Voy a amarte, como tú siempre lo has deseado.
Voy a amarte así,
tal como ama una mujer, dispuesta a entregarte
la vida, el alma, el cuerpo y la piel...