Quiero estar contigo
en un lugar,
en donde sé me dirás
TE AMO.
Déjame pensarte,
dibujarte en el silencio,
colorearte con pinceles revelándote
en secretos, desnudar tu alma
y caer rendido a tu amor,
quiero beber de ti,
saberme sueño al estar despierto,
ser el tiempo largo en un estanque
donde las hojas son la luz del agua,
déjame pensarte,
no importa el modo ni el motivo,
déjame encontrarte.
Déjame invulnerable, no es poco,
quiero sentir esa vida entera de tu bien
más intimo, quiero la poesía de lo
poético de tus labios y dejar tu sombra
indiferente, y volverte un poema pendiente,
para ser una sensación semejante toda vez que te miro,
déjame la tímida pasión,
la dura convicción de una intuición muy personal,
déjame casual,
un encuentro con mi voz que no conozca el desmayo.
Déjame el nosotros, tú y yo somos libros,
no sólo las imágenes que destellan los poemas sino, su lectura,
la increíble escultura que esculpimos letra a letra,
la silueta de la misma materia emoción con que soñamos,
como una puerta que permite entrar todo en conjunto,
un mundo de apariencias,
un ritmo que sólo los ojos capturan,
una comprensión de la libertad,
un espíritu precipitado y caprichoso.
Déjame en tu rostro caer y caer y caer lentamente,
acercándome despacio,
eligiendo,
demorándome cual flor en su aroma,
vigilando, sin preguntarte nada, muy lento,
sabiendo bien que todo llega de pronto,
sin necesidad de aviso,
déjame escapar de tu boca y morir suave
de a poco muriendo, como cuando se nace en pedazos.
Déjame en las manos largas horas sobre tu cuerpo,
quiero yacer en recuerdos,
quiero llegar a ti con noches y días sin nombre todavía,
como un poema pendiente del mar,
del aliento del mar que todo lo envuelve,
como el viento golpeando las ventanas,
el viento desnudo,
esa vislumbre que no tiene dueño.
Quiero estar contigo en un lugar,
de la tierra también,
de algunas ropas viejas,
derramando mi corazón ´
cómplice en ti, TE AMO.
T de S
MRGC
Namaste