Juan Senda
***ADIÓS GAVIOTA MÍA***
- CARACÁS
-
- Caracás es tu risita
- cuando se arruga tu cara,
- y se extiende por tu boca
- como una cornisa blanca.
- No me gustan tus risitas
- cuando pones boca larga,
- ni tampoco labios signios
- como la astuta urraca
- como la gata que corre
- para alcanzar una rata
- y aquel viejo socialista
- que se tilda y se jacta
- de ser amigo del pobre
- pero primero es su plata,
- y se esconde como obrera
- pero al fin es millonaria,
- y tiene cuanto se quiere
- de repente da la espalda.
- Esta rabina saltona
- tienen la cara de vaca,
- una se llama marela
- y la otra es la gallarda.
-
- Reíros amigas mías,
- reíros a carcajadas,
- como se ríen las monas
- y las bocas de las ranas.
- En vuestro mundo de risas
- también hay risa de cabras,
- y risa de burras tontas,
- y risa de burras pardas.
- ¡Vos no veis que toda risa
- a cualquier boca contagia!
- ¡Si a más risueñas, más risa,
- a más sarnosas, más sarna!.
- Hay fingidoras de risas,
- hay besadores de caras,
- hay quien se tuerce la boca
- para contar sus falacias
- Reíros amigas mías,
- reíros a carcajadas,
- que por mucho que riáis
- vuestras risitas son falsas.
- Los muertos también se ríen
- de las poetas más falsas,
- porque sin sonar su lira
- les ha de “sonar su flauta”
- Aquí te queda la risa,
- aquí te queda tu farsa,
- con esa lira sin dedos
- y esas notas sin flauta.
-
- IÓS GAVIOTA MIA
- Adiós gaviota mía,
- paloma de mis poemas,
- ya nunca más nos veremos…,
- jamás por la misma senda,
- ni te cantaré baladas
- ni te contaré más penas
-
-
- SABER DE TI
-
- Si en tus escritos pusieras
- lo que tu piensas de mi,
- que gusto y placer te dieras
- a satisfacerte así,
- pero también que supieras
- y en el fondo conocieras,
lo que yo pienso de ti.