Yo conozco
el sonido de sus pisadas
la dulzura de sus labios
y aquella rara sensación
que le da, cuando nos besamos.
yo se,
cuando me desea ver
cuando me quiere abrazar
hasta cuando me quiere reñir.
Yo sé de amor,
por que ella me enseñó a amar,
por que ella me mostró el camino
más corto a la felicidad.
Yo sé,
cuando ella está por llegar
por que el corazón
se me acelera sin motivo,
o sí, ella es el motivo.
Yo parezco adivinar
sus movimientos
y sin un por qué
sé donde encontrarla.
Ella esparció sonrisas en mi vida,
me anegó de caricias cada día,
y dijo que me quería.
Ella ató su cintura a mi ego
y yo, preso y ciego de placer
sólo por sus ojos veía,
cada instante es para recordar,
cada oleada de sus tierra en mi,
cada rocío de su manatial refrescó
mi piel y mi alma
se llenó por completo
de su forma de ver el mundo
por que ella era mi mundo.
Ella me habló de todo,
pero nunca me dijo
como era el abismo
de su ausencia.