Nada hace mas lento tu caminar que el pasado.
Nada pesa más en el corazón que viajar por la
arena mojada y lenta de los recuerdos, que
aunque borrosos y lejanos, mojados y angustiados,
retrasan el amanecer, el crepúsculo del brote quejado.
Ya apesumbrado y dilatado se pueden ver algunos
destellos del día nuevo, que aunque muchas promesas
tiene, contra el pasado no contiende. Por que mientras
el pasado siga ahí asomado, el sol jamás brillará extraordinario.