Triste amor
de esos que se quedan ha vivir,
de la parte de adentro del corazón,
arropados de dolidos recuerdos.
sufren y se marchitan,
pensando en un querer que no volverá.
Que cosa ¡Oh Señor Dios.
Tu sabes del porque de este sentir,
Sé que no me lo diras,
no tengo derecho a ello,
lo pagaré con mi sufrir.
Como otros pagaron por mi
cuando la ceguera de mi desdén,
los dejó sin luz.
Así es.....Así es....
L.M