Tu perfume llega a mí tardío
haciéndome ver cosas que no existen,
sé que lo ocurrido entre tú y yo
fue un invento mío.
Porque tengo el corazón
cansado de querer a una ilusión
que no llego a poseerle
ni en la imaginación.
Soñar contigo no fue lo mejor
que pudo pasarme,
sufriendo callado de dolor
en el alma,
yo mismo logré castigarme.
No aguanto más la pena de vivir
con solo mirarte,
en esta espera tan larga
sin poder
tocar tus manos y ni siquiera abrazarte.
Mi corazón se cansó sin alcanzar
el deseo más fuerte,
desvaneciéndose de tanto esperar
por quien
ya ni sé si podré quererle.
¡Qué desilución la de este amor
inalcanzable!
Distanciados; así nos unió
el destino,
en una mística relación.
Julio Medina
6 de noviembre del 2013