Cuando decidimos amarnos
fundimos almas y cuerpos;
historias, nombres y apellidos.
Fui tuya hasta la saciedad;
fuiste mío, hasta mi soledad.
Enredamos pasión amor y deseo
que yo nunca pude ni podre desenredar
Por mi parte, ahí se queda
para nunca poder olvidar.
Te amé y puse un sello de “para siempre”;
te amo a pesar que estás ausente.
Ausente de mis ansias;
ausente de esta mujer que te añora.
Pero sigues presente
en mis primeras pensamientos
y mis primeras palabras
de cada amanecer.
Presente en mis sentimientos,
presente en mis nostalgias,
presente en mis sueños.
en los que te amo
con loco frenesí.
Amor de mis amores,
mi único, mi verdadero amor.