¿A dónde van tus ligeros pasos,
tu mirada triste y taciturna?
¿Persigues colores del ocaso
o quieres fundirte con la luna?
Sigo en silencio tus huellas
tu frágil y cansada silueta,
la estela de tu estrella
aún cuando cierras esa puerta.
Dama solitaria… Soy tu sombra,
callada, siempre en espera
escuchar el canto de la alondra
ave, del amor mensajera.
Mirna Lissett