Ese día, el fue tan feliz a su lado, tanto que olvidó todo lo que le rodeaba, solo eran ellos dos, y un universo que palpitaba al ritmo de dos corazones, parecía que ese momento nunca terminaría, pero, de pronto el abrió los ojos y notó que en la mirada de quien amaba, no había otro sentimiento más que la amistad. Entonces le sonrió, lo abrazo fuertemente una vez mas, para después dejarlo ir mientras una lagrima se asomaba, como única testigo de su amor por el..