Te echo tanto de menos
que es un continuo echarte de menos.
Te echo tanto de menos
que hasta dormido te echo de menos.
Te echo tanto de menos
que el corazón me duele de echarte de menos.
Te echo tanto de menos
que es la eterna añoranza de lo que no ha sido.
Te echo tanto de menos
que es un eterno pensar en ti cada minuto.
Te echo tanto de menos
que tengo tu imagen fija en mi mente.
Te echo tanto de menos
que mi destino es echarte de menos.
Te echo tanto de menos
que no sé qué hacer para dejar de echarte de menos.
FÉLIX