Luna: Que de la noche prisionera,
Al brindarle con luz de estrellas,
Escondió de forma altanera,
La envidia de tus epopeyas.
Te ofreció el infinito del cielo,
Vistiéndote con esa mortaja,
Preparándote para el duelo,
Con fecha y hora marcada.
Como una princesa en su torre,
Que ansia al valiente caballero.
Tú esperarás a que el día aflore,
Y la libertad como tu derrotero.