- PRIMER CICLO -
Barro tus cabellos
y escucho tu tristeza
al páramo de tu espalda joven.
Sé que ha anochecido
porque mi despertar
es una desmemoria honda
que vacila bajo las puertas.
Verte espeso en el lecho,
sumiso al borrón que mañana
retorcerá tus horizontes
tan impávidos como necesarios,
es mi barrer perdurable
con la barbilla en mi garganta.
Supongo una ventana abierta,
un médico ausente tras la aldaba,
mientras recojo finitas ausencias
que tan insolentes te nombran
cerca, alejadas o ajenas
al batir de mi escoba.
Kabalcanty.copyright©