maphu

Dialogo de los amantes

ahora, fundidos en el abrazo, dime que no me has soñado en el silencio de la noche, que no has deseado el sabor de mis labios, el olor de mi cuerpo y anciado el roce de mi piel? porque has sometido a mi cuerpo a la espera de este momento, porque me has torturado solo con tu ausencia.

un silencio profundo cierne a dos cuerpos mientras el varon calcula su repuesta..

amada mía, acaso es ausencia no tenerte en mi mente a cada instante, desearte en cada minuto con el sonoro ritmo del reloj, que el silencio que acompaña mis noches susurra en agonía tu nombre, que la brisa trae consigo el aroma de tu piel, que en tu ausencia acaricio tu recuerdo hasta perderme en tu piel.  que temo con el paso de las horas naugragar en tus aguas y sambullirme hasta la inconsciencia, acostumbrarme a tal corriente y entregar mi vida a ella, aún así tus ojos son mi lucero, la luz en mi perdición el faro que me trae de vuelta mientras me pierdo en tan calidas aguas.  Las noches son largas mientras mi mente revive los pasos de nuestras danzas, el sonoro repique del choque de nuestros cuerpos, que la melodía que arrulla mi sueño se compone de tu vos debil  y extasiada, que mi cuerpo refurge en la oscuridad al brillo de tu sudor y duerme con la esperanza que la luz del día traiga a mi regazo.

fundamos en el beso nuestras ausencias, olvidemos la distancia en el abrazo de nuestros cuerpos, y que los ùnicos reclamos que nos acompañen sean la necesidad de amarnos en nuestro apasionados encuentros.