Sé que puedes sentirme aun más cerca
Que tu propia soledad,
Mirarte sin mirarme en el espejo de mi soledad
Sintiéndote ansiosa,
Y la distancia tejiendo en su silencio
ansias de fresca ternura
por cada hora de demora que no me ves llegar,
tal es el sentimiento
dibujándose en la quietud involuntaria de nuestros corazones,
desafiándonos ante la proximidad
de nuestros separados y distantes cuerpos,
aplazando sin reparo de complicidad
las carisias furtivas que nos debemos,
dejándonos llevar por lo que somos
si aparentar lo que no queremos ser,
porque
solo en esa clandestinidad
mi soledad como tú soledad son como esos dos cristales
que fusionados en la intimidad
relucen para sí
ese amor que solo puede vivir en penumbra.