Tal vez debo dejar de mirarte, tal vez debo dejar de olerte, de querer sentirte. Es que ¿Acaso mis sueños no valen?, Tal vez no, tal vez solo me elevo hasta caer. Con esa, esa caída que me impregna de dolor, un dolor gustoso, que duele pero al mismo tiempo me alienta a escalar de nuevo, a soñar, a sonreír, a mirarte e imaginar cómo sería estar juntos.
Pero…….. Esto es imposible, tan imposible como atrapar un grito en una botella, como secar la lluvia con un pañuelo, como poder vivir mil años, como que tus ojos y los míos se fundan en un te amo. Bien dicen que los suspiros son palabras no dichas, es por eso que cada suspiro mío, es hoy una palabra escrita.