Tenemos tanto que aprender,
de nosostros mismos, primero,
ayudar a alguien siempre será bueno,
en el país de todos, de todos los chilenos.
Vamos mejorando, poco a poco,
esa es la fé que te tengo Chile,
por que los sueños, sueños son,
más, a veces es bueno soñar.
Mi síndrome es la bipolaridad,
esta es la sentencia de mi pueblo,
para él que crea, escribo estas letras,
bendito tú hijo, ese es tú fruto.
Prótegelo, cuídalo, ayúdalo,
para que entienda como es el mundo,
todos tenemos derechos humanos,
pero, primero están los niños.
Ser un ejemplo es lo difícil,
todos tenemos nuestro lado infeliz,
todos somos buenos y malos,
eso es lo más aberrante del tiempo.