Cuando el amor es esquivo,
el corazón se cansa,
se inquieta, se desangra...
no emite más latidos
que aquellos tan precisos
que lo mantienen vivo...
solo existe...sin sentido.
Cuando la luz del amor
nos abandona,
nos dice adiós y llora...
no hay nada en este mundo
que nos diga la hora
de balbucear el nombre
que mi piel y alma añoran.
Cuando mis ojos tristes
no te ven,
mis oídos atentos
no te escuchan,
mis labios impacientes
solo sufran
el frío sentimiento del adiós...
y mis manos crispadas
no te tocan
cual parábola al viento
sin destino...
seguro que ha quedado
en el camino
ese amor...
que era el fuego
entre tú y yo.
Alicia Santi
26-11-13