Eres la voz que se apago en el ayer, lo que no recordaba y en silencio reprimía.
Eres la experiencia deja vu que no quería tener, la insolencia que existía.
Me niego a volverte a vivir y a la vez ruego por no perderte, confusión idiota.
A mis años no debería volver a tenerte y aquí estoy, estancado en tu poema.
Desilusión pasajera de la que me repongo siempre por inercia y no me explico como.
¡Juegas!, ¿A que juegas? Conmigo quieres jugar como un bebe con su sonaja.
Necesitas ser necesitada y no te das cuenta que te pones en evidencia.
Yo te dejo elevarte cual cometa de papel, que con la tormenta se he de desvanecer
Y te veré caer desvencijada al suelo rogando como el cometa por más hilo, más altura
Y ya no podrás elevarte. Que lastima, creí que empezaba una nueva ilusión y fuiste tu quien quedo ilusionada. Eres bella pero vacía, eres una bella peña: Majestuosa pero sin vida en tu interior.
Ilusión marchita por tu miedo a tener algo verdadero al fin y no seguir siendo un peón más en el gran ajedrez del amor…