Cármen, ajada por la edad, eso dice ella.
Doblegada por su pareja, eso calla ella.
Era una tarde de otoño, fría y ventosa.
El equipo pierde, no ganará la apuesta.
-Tráeme otra cerveza tontona mia.
-¡Ostias cuanto tardas!, no sabes hacer nada.
-¡Pues sí que gastas genio!. Toma la cerveza.
Asió el botellín, el quinto de esa velada.
Al gol del contrario se lo lanzó a su amada.
Cármen, sonrie al verme, es feliz, eso dice ella.
Su sonrisa es una mueca, sufre, eso calla ella.