Contigo aprendí miles de cosas.
Contigo aprendí amar.
Contigo aprendí cosas de la vida.
Contigo aprendí ah perdonar; tú me enseñaste como
hacerlo.
Cuando te conosí me enamoraste.
Cuando te toque me cautivaste.
Cuando me abrazaste te abrase.
Cuando te di mi mano me levantaste.
En ti encontré amor, paz y felicidad.
En ti encontré alegriás y sonrisas.
En ti encontré la compañia que anhele.
Cuando me encontraste estaba olvidado en un mundo
oscuro; era un callejón cerrado donde sólo hay reina
la violencia y las drogas; donde sólo hay dos caminos
la cárcel oh la muerte.
Ni siquiera cumplía los 14 años cuando me meti al mundo del las drogas;
ah hora soy un hombre de provecho.
Gracias Señor Jesús por sacarme de es mundo oscuro;
hoy vivo feliz; gracias Señor tú me enseñaste el verdadero camino.
Jóvenes no se dejen manipular por los malas amistades;
sean hombres de provechos.