srakkin

Libérate, reducida pupila centellante

Ser libre ladraban tus ojos cuando reprimía 
tu consumir de libertad,
tu deseo de unir fronteras más allá de planetas,
de conectar estrellas e ignorar a la luna
aunque capricho mío siempre fuera.

Deseo más libre el que siento
cuando con tiempo y reprimendas propias
comprendo, lamentable el día en que no desgarre tus ojos
para ver la vista tuya, ver con frente en alto
tu belleza, la belleza de tus muslos.

¿Lamentable? No, querida,
lamentable el día que nos embriagamos, 
que nos besamos solo una noche de varios días,
inflamados en lo insignificante,
insignificante de mi perdonar a días de tu partida