De este tiempo sumergido
en las cargas de la prisa
y de tantas ramas secas
y del polvo en el camino
solo digo,
eres sueño.
Me sacude la nostalgia
en el grito del silencio
y las grietas despojadas
de la luna en bella noche,
y así, solo pienso
tu regreso.
No tendría para darte
la palabra del poeta
ni el cantar de las alondras
al romper la amanecida
en las ramas del cerezo
¡Ah, mi amada,
solo darte
un beso!