Este mundo de raudas tarjetas de crédito
de estrépito y vacío
de sangre
que llega al río sin que la veamos
porque estamos
- felices -
comprando alguna cosa
Un shopping center en medio de leprosarios.
Este mundo
que ya uno no sabe si
es o no es de veras
y en el que todo es espectáculo
- divertimento, bah -
por el que puede cobrarse entrada.
Un shopping center de fiesta entre leprosarios.
Este mundo nuestro
del que aunque sea un poquito
somos responsables...
- ¿y si luego no nos dejasen
pagar con tarjeta?
Un shopping center sitiado por leprosarios.
Pero riamos, riamos
no sea que alguno crea
que tenemos miedo
y están oxidadas y mudas las armas
de nuestros guardias
de seguridad.
Un leprosario de lujo entre leprosarios.