GAVASE

CAMINANDO ENTRE VIÑEDOS

 

El premio no hace al poeta,
sino el cuidado y los mimos,
recogiendo sin más dieta
buena vid para en la meta
gozar de ricos racimos.

 

En viñas buscando historias
de frutos sin recoger,
amanecen viejas glorias
que buscando en sus memorias
no tienen desmerecer.

 

Siempre existe la esperanza
de un viñedo lastimero,
donde sazonar la panza
con vino añejo de crianza
en rancia bota de cuero.

 

Da lo mismo la posada,
todas tienen buen brebaje,
siendo añeja la pisada
bienvenida la catada
en camino de pasaje.

 

No hay licor que desmerezca,
ni vino que no consagre,
aunque nunca lo parezca
y de linaje carezca
será valido vinagre;

 

para aliños entre versos
impregnando de buen jugo
y dejando siempre tersos
entre aromas muy diversos
añadidos a su yugo.

 

No hay parra con uva mala,
ni sentir que ande tupido,
siempre existe buena tala
agregando bella gala
en viejo y roto vestido.

 

Inundando de bonanza,
abono y sabiduría,
siempre da gusto la alianza
resembrando nueva danza
donde solo pena había.

 

En majuelos de la vida
nadie es malo y descompasa,
dándole buena salida
a una pena sostenida
y dejada en dulce pasa.

 

Caminando entre viñedos,
recogiendo la cosecha,
fumigando los enredos
asentando nuevos credos
y tapando cualquier brecha.

 

El premio no hace al poeta,
ni siquiera ansia su busca,
solo quiere llaga prieta
de malezas en cuneta
rogando limpieza brusca.

 

GAVASE