Catalina

El teatro de la vida

“¿Hola, quien eres?”

Y así comenzó la función
en un teatro lleno de fantasmas
hambrientos de romance, locura y pasión

Cuantas escenas
se escribieron sobre la marcha,
dejando expectante incluso a la Vida y el Destino
que atentos nos vinieron a ver

Era hora de que los protagonistas
dejaran ya las tablas de su obra
para dejar descansar a Cupido
que se confundía entre la ficción y la realidad

Un tiempo se acaba,
un año dice la gente,
un segundo para el espíritu,
un acto más para mí

Aplaudo, incluso de pie,
por final tan maravilloso que me regalaste
y que como “Broche de Oro”
muy bien lo llamaste

Y esto sigue siendo único
y es tal vez por lo que tanto lo amo.
Caen rosas regaladas del observador, que fuimos nosotros mismos
Cuando el sol sombrea al dichoso público presente

¿Final?

La vida es un poema
que acaba solo con la muerte, amor
y hoy me hiciste escribir
un verso triste, pero tan dialécticamente maravilloso
que Debussy, para nosotros,
comenzo bajo la luna su piano a tocar

Mientras baja el telón
tomo tu aun temblorosa mano.
Mis labios crearan la nueva melodía que escucharas en secreto para ti,
Y te digo:
Te amo,
gracias por hacer conmigo
esta particular obra
Te amo
gracias por no dejarme sola
ni siquiera en mis monólogos mas tristes
Te amo

Un tiempo se acaba,
un año dice la gente,
un segundo para el espíritu,
un acto para mi.

Un tiempo comienza,
un nuevo año dice la gente,
un nuevo segundo para el espíritu,
un nuevo acto para mi

Suelto tu mano,
porque un adiós, adiós debe ser,
pero me vuelvo a respirar otra vez de esos ojos que aun sueño
y te grito con mi mirada
que, quizás no lo sepas, pero aún queda mucho por actuar

Camino, en Paz hacia la puerta de salida.
Afuera el mundo real,
lo que sea,
está a punto de comenzar,
y tal vez te podre decir:
¿Me acompañas a un café?

Nuestro pequeño arte
fue, es y será
“para siempre y para nunca”
nuestra amada guarida