Una lagrima recorre mi rostro
como una caricia triste
que me consuela por las noches
sabiendo de que te extraño mucho,
una sensación rara atravieza mi pecho
y mis manos se ponen inquietas,
la mirada perdida, mi boca seca
el silencio me acompaña
y la mitad de un cigarro me mira con lastima.
Te hablo, te llamo en silencio
pensando que quizas me escuchas,
me asomo por la ventana buscando en la noche
la explicacion a este sentimiento,
tan inoportuno que se me presento a la mitad del camino
que me da alegrias y tristezas
por tus idas y venidas.
Te Amo