En mi horizonte veo
tu vela y tu barco,
por mi playa navegando,
en el mar de mis sueños,
a tu recuerdo me abrazo.
Tú eres mi mar y mi patria,
aunque no puedas
darme nada,
tu presencia me embriaga.
Ata mi vida al ancla
de tu barca,
amarra mis sueños
a tu destino eterno,
une nuestros pensamientos,
nuestros profundos
secretos y deseos.
Escríbelos, téjelos,
fúndelos en tu vela,
azul turquesa,
estandarte de ilusión,
para que el viento
los mueva, los bendiga
y los materialice en la tierra,
pues el viento hacia ti
me ha llevado,
igual que a la vela el barco.
Coge mi mano en tu mano,
mira no es mentira,
no te engaño,
tu destino en ella está escrito,
como un augurio
de buenaventura,
de dicha eterna a tu lado.