Si mis ojos dejaran entrever
el secreto que guardan contigo,
tal vez entenderías porqué
a veces, parecen perdidos.
Conocen este amor que detrás de ellos
a toda la razón desalojan,
dejando al corazón en desvelo a sabiendas
que, amarte, lo tengo prohibido.
De tu figura alimento recuerdos
que en las noches se visten de sueños,
mis manos aferran tu cuerpo
cuando tus labios sellan los míos.
Amanece y parece distinto
a sazón de la duda que irrumpe,
delineando tal vez un encuentro
que ensayo sin causa aparente.
Dos caminos paralelos
con tantos obstáculos diferentes
dejan solo a la suerte
que tus ojos encuentren los míos.
Si tropezar nos dejara
por un instante de frente
no sé si me animaría
confesarte lo que siento.
No imagino respuesta
que trunquen mis sueños,
así, dormido o despierto
quiero sentir que te quiero.
.