Cuando el tiempo sin piedad
te aleja, de aquello que un día
te dio fuerzas, paz y alegría,
quedarán los recuerdos
para acariciarlos en tu pensamiento.
No, no estés triste, que aquello
que te llenó de felicidad y dicha,
lo llevas intrínsecamente
atado a tu persona.
No llores, porque todo lo vivido
y no vivido, en tu ser está inscrito.
Momentos bellos, malos momentos,
todo fue necesario experimentarlo,
en ello tu existencia se ha forjado
como hierro a fuego modelado.
Por qué añorarlo, si eso está contigo.
Si quieres conocer tu pasado,
mira tú presente, ese es el resultado.
Si quieres conocer tu futuro,
mira tú presente,
porque esa es la causa.
Pasado, presente y futuro
todo está unido, relacionado.
Recuerdos pasados,
hermoso fue vivirlos.
En el presente, la corriente
fluye como el río, no se detiene,
en busca de nuevos
horizontes futuros,
porque la vida es tiempo fluyendo,
en el eterno presente.