Noche lóbrega silencio de mi alma con Luna ausente.
Una lágrima de mi corazón recorre fría mi mejilla,
Por un recuerdo que mi mente invade con penumbra.
Al levantar la copa de vino que ayer fue tan dulce,
Frente a su bella imagen que hace latir mi corazón.
No lloro de tristeza cobarde seria, pues es de pura alegría,
Al saber que al otro extremo del mundo tan incierto.
Permanece tan bella la flor que amé, amo y amare.
No sueño más su regreso a mi vida la veo muy lejana
No pienso más el sentir calor y amor entre sus brazos
Sueño de abril demasiado bello para ser verdad.
Si fue sueño ¿porque la copa yace vacía en mi meza?,
Luna bella que pareces de mármol asoma ya tu sonrisa,
Llena mi copa con tu dulzura como hiciste aquella vez.
Quiero brindar por la alegría de verla tan feliz,
Quiero desterrar mi tristeza a la paz del ocaso.
Quedarme con la clara idea de no haber prometido,
Al azulejo del manzano amargo escribirle un bello canto.