Mi recuerdo camina junto a ti,
mi sombra extiende su mano intentado llegar al recuerdo
y no perderse en el olvido ingrato que se aleja cual arlequín sin risas ni llanto.
Me pierdo en el aire y en el sabor de tu olor.
Fantasías absurdas que se adueñan del eco que el tiempo entre nosotros dejó. Conquistadas sombras que llenan de temor las noches sombrías en las que intentamos (en vano) hacernos el amor.