MI BLANCA PALOMA
Amor mío son mis sueños
que deliran día y noche,
por la selva prodigiosa
que derrite mis cristales,
y la puerta de mi sombra
aparece en mi ventana;
la negra y blanca paloma,
que si escribo poemas
la noche se vuelve loba,
se clava en mi costado
la vida cruel y angosta,
y mi sangre se derrama
por las cordilleras mías,
cordilleras de mi infancia;
cruel destino de mis días
desnudo, frio, mi playa,
clavado en el silencio,
clavado en mi nostalgia,
que gracias a este sueño
oh, sueño de mi esperanza,
que se posó en mis hombros
con su castillo y campana,
es la mía “Gioconda”
y la perpetua dama,
el eclipse de mis ojos,
la mía enamorada,
la isla del tesoro
que se adentró en mi alma,
la paloma de mis iris
que mora en la distancia,
y vive con mis delicias
esta mariposa mía,
esta mía enamorada.