Héctor(micorazón)

Qué fortuna

Qué fortuna, qué dicha, el ser humano

cuya vida y alma son su riqueza,

no sufrirá de la cruel pobreza,

sea niño sea joven o anciano.

 

Qué gracia, maravilla, los hermanos

que ayudan, y la madre que reza,

y el oro que en balanza no se pesa,

y puede ser contado con la mano.

 

Yo con un breve trazo de mi pluma,

a quienes son mi más rico tesoro,

con el deseo que la tinta auxilia:

 

Les sume Dios tanto como me suma,

la salud y los años. Esto imploro,

por ustedes; amigos y familia.