Floreces cada mañana de sonrisas el día,
cada mañana vienes y bajas una esperanza
que habla de un prometedor futuro,
lleno de la belleza de tu tiempo.
Y dices con palabras conocidas cosas
tan distintas como verdades que son
más que piel y beso, más que idea.
A veces mujer, sin saberlo me das
más de lo que necesito, más de lo que ansío
por que parece indicar que naciste para darme
el mundo entero y ese mundo eres tu,
tu que no necesitas ropa para enseñarme a volar,
por que no hace falta cuerpo para recorrer el azul
lleno de tu sonrisa que es viento y pluma.
Tú que masticas las horas y me las das
en salados jugos que dibujan música de tu boca
que me llama de mil formas
que son polen a mi colibrí.
Tú que caminas con los ojos las cosas mustias
y las incitas a codearse contigo para hacerles
entender que luchando se llega a mañana
y mi mañana sigues siendo tú.
A veces mujer, no sé que decirte,
pero es que no hace falta palabras
para decirte que mi corazón late poor ti
que soy un triunfador, un ser lleno de alegría.
Hay entonces mujer, primaveras repletas
de ti y tengo fecha exacta para que me faltes
si es que un día me faltaras y esa fecha
es un día después de la eternidad
por que hasta ahí dominarás las cosas que
conforman tu sonrisa y yo quiero ser tu sonrisa.