Pupilas de fríos copos, punzando
en tus ojos de áridos desiertos
no reflejan oasis ni estrellas
sólo un glacial que al alma quema.
Ayeres de primavera marcharon
sin abono las corolas murieron
mi amor de fiestas bohemias
no te inspiraba caricia o colmena.
¿Cómo imbuir tu corazón deshauciado?
¿Cómo hacer que germine el aliento?
no hay nada que hoy te conmueva
y tus labios por mi no deleitan.
Ése mágico vals que nunca bailamos
esas notas que en fantasía unieron
el latir de dos almas gemelas
hoy naufraga, lágrima en galerna.
Sólo quisiera creer que has amado
aunque ya haya diluído el momento
tus, “lo siento” duelen, cercenan,
aniquilando mi alma en condena...
Copyright© 2013 Rocío Vega-Ponce