Hablabas y hablabas cada vez que yo te visitaba
Y a mi no me importaba porque todo lo que salía de tus labios me interesaba-
Pero tu nunca escuchabas las palabras encubiertas en mis frases furtivas que te hacían sonrojar
Y yo,
con la ilusión de un niño que descubre el primer amor
Contaba las horas para volverte a visitar,
soñando que en la próxima vez te lograría tener.
Pero tu ya suspirabas por ese amor lejano, idealizado e irreal.
Y para colmo no parabas de hablar de el.
Usando frases de una niña que se niega a ser mujer.
Entregando toda tu inocencia a ese amor que nunca llegarías a conocer
Ese maldito amor que a mi tanto me atormentó
Y de ti me alejó.
Porque tu rechazo a mi amor nos distanció
Y de mi boca salieron palabras de odio y rencor...
Porque no podía entender que prefirieras ese frío y falso amor lejano
a mi cálido y sincero amor cercano.
puede que a el le entregaras el corazón.
Pero creeme cuando te digo que ni en cien vidas el te amaría lo mismo que en esta te he amado yo.