Al tres por dos se oía.
Quisieron ir presurosos
al banquete sin manjares
de otra vida.
Personas normales y
de buena reputación.
Yo en vida les vi
un no se que....raro,
una angustia infinita,
como un alma hecha jirones,
como inocencia perdida,
como un llanto amargo y callado
en su pálida sonrisa.
Buenos ciudadanos del pueblo,
gente noble y sencilla.
¿Querían notoriedad,
cuando sus cuerpos colgados
se mecían, adornados con sus sogas,
y sus moradas lenguas de palmo
asomaban por sus bocas?
¡Se ha ahorcado
Fulano de Tal....!
Que raro...con lo bien que le iba.
Siempre eran hombres
de talento,de talante y de armonía,
de espíritu sereno y claro,aunque...
yo siempre les vi un no se que...
raro.
¡El muerto al hoyo,
el vivo al bollo!
-decían bocas distraídas-,
ha ido a confesarse
con la monja de la guadaña
de por vida.
Al tres por dos se oía,
quisieron ir presurosos
al banquete sin manjares
de otra vida,
personas normales,
de buena reputación,
gente noble y sencilla.
¡Se ha ahorcado
Fulano de Tal...!
Que raro...con lo bien que le iba.
©ALFONSO NIETO CARRETERO