En esa mirada apócrifa
reside el miedo
y sus raíces
En sus labios grices
residen recuerdos
lacerados
En sus lágrimas negras
reside el dolor
y su ceguera
En su corazón restañado
reside la esperanza
y sus matices.
*Imaginate mirarte al espejo cuando hayas renunciado a todo. Por eso son estos versos.