No fui de tus brazos presa
ni de tu boca fruta madura
no fui de tus noches lecho
ni de tus ojos la luna,
no me desperté en tu pecho,
y no amanecí en tu lecho.
Jamás dormimos primaveras
y nunca amanecimos inviernos.
El amor nos creció en los dedos
y en el alma y corazón.
Nos tocamos sin tenernos
nos amamos sin darnos
nos abrazamos al olvido
Y nunca fue nuestro.
Era marzo con sus vientos.
Era abril y tú te fuiste,
sin importarte siquiera,
si yo quería que te fueras.
El cielo te recibió
Y mis brazos vacíos dejaste
ah ocho meses que te fuiste
mi corazón sangra la herida
como he de decirte,
que aun te quiero ¡vida mía!
Fuiste mi canción mi baile
mi mañana y mi noche
cada día del calendario
tu amor fue un derroche.
Tengo que vivir sin tus canciones
tengo que soñar que todavía te tengo
para no morir de tristeza
y no caminar por el viento
buscando tú destino.
Quise llegar a tiempo
pero me lo impidió la noche
se apagaron las estrellas
para que tu brillaras entre ellas
y no encontré el camino
para llegar a tu lecho
y esa noche dormir contigo,
cómo preámbulo a tu despedida.
Adiós amor, ocho meses sin ti,
y todavía sangra la herida.
Alicia Pérez Hernández
-No es la pluma la que escribe es el ama-