david1927

ConfesiĆ³n.

Con regularidad habla y expresa que yo debo tenerla enamorada
¿He fallado? Es lo más probable.
Pero, usted, la exigente, la que nunca está conforme
¿Se ha preocupado por enamorarme a mí?
¿Ha tenido la delicadeza de ir más allá del reclamo o la orden de “obediencia”?

¿Qué si deseo estar con usted? Si, ¿Por qué no?
La cuestión es que soy humano, y, como humano poseo grandes defectos.
No lo tome a mal, como con frecuencia toma mis palabras y suspiros.
Pero…
¿Cuándo fue la última vez que usted se dirigió hacia mí, con el corazón en la mano?
¿Cuándo fue la última vez que confió en mí?
O mejor ¿Cuándo fue la primera?
¿Cuándo fue la última vez que no hizo del sexo algo ritual?

Ya lo he manifestado, estoy predestinado a equivocarme.
No quiero ofenderle: si lo desea, no responda ninguna pregunta,
Pero no me amoneste por las incógnitas que me surgen.
Si le incomodan… ¡deséchelas!

Un defecto humano (por supuesto mío),
Es que las cosas deben repetirse constantemente para no ser olvidadas;
Y ya he olvidado que se siente ser amado.
¡No! No la estoy agrediendo, ni reprochando, solo le estoy confesando.