Eres tú la compañía
en mi soledad de siglos…
en el desierto donde habito
eres la lluvia refrescante de mi alma,
eres el rocío que acaricia mis amaneceres,
eres esa paz en mis días de tormento,
eres el arco iris cuando todo está nublado.
Eres el faro que ilumina mi camino
cuando estoy perdida,
eres tú quien me da consuelo
en mis días desolados.
Eres tú quien me da fuerzas
cuando me siento agotada.
Cuando mis ánimos decaen
eres tú quien me levanta.
Y aunque estés
tan distante y no te vea,
eres mi sol y mi alegría...
¡Eres tú la vida
que alimenta el alma mía!
Felina