BAJO MI ARBOL DE NAVIDAD
Bajo mi árbol encontré
a una pequeña muñeca,
con los cabellos oscuros
y vestida de rumbera.
Al apretarle las manos
cierra sus negros ojitos,
y al tocar su corazón,
emite un leve suspiro.
Las instrucciones de uso
todas las tiene bien claras;
es frágil y no soporta
que la dejen en su caja.
Le gusta ir a pasear
de preferencia en las noches,
pues ella sabe bailar
y cantar tiernas canciones.
Me dijeron que la entregue
a una persona especial,
que al tenerla entre sus manos
no la vaya a destrozar.
Es una muñeca extraña
que cuando se va a descansar
necesita que la arrullen
pues solo así dormirá.
Si estás dispuesto a cuidarla
yo te la puedo obsequiar,
pero te advierto mi amigo
no la puedes regresar,
tendrás que cuidar de ella
con esmero y con pasión
no es difícil, ¡te aseguro!
¡solo necesita amor!
Lluvia 06 enero 2009