Quetzales me esperan volando,
volando las horas, volando los años,
el tiempo no espera
y rezan mis labios:
¡turquesa es mi tierra!.
Mi nombre lo gritan cantando,
botellas, cigarros, morenas,
cascadas azules,
la selva es el manto
del sur y su mágico encanto.
ALONSO VILLANUEVA