No es necesario ser del hormiguero
Para jactarse de todo lo acontecido,
Cuando las pisadas matan
Nos empobrecen a deshielo
Los escalofríos que causamos no les llegan
ni a los sesos,
por su cien se desparraman nuestros sueños
y esperanzas con sabor cotidiano
y desde siempre madrugador
esperanza con insomnio crónico ya en mi país,
de cambios gratuitos y cifras mentirosas.
Mi hormiguero tiene la suficiente gente analfabeta mental
para seguir creyendo en el despertar de la caridad
política y judicial,
mi hormiguero es grande y tiene sueño,
pero ya la gente tiene que pensar,
que las hormigas pronto nos alcanzaran.