Sevilla la Nueva, 26 de mayo de 2009
Y doy, el don de la virtud,
conseguir la inmensa plenitud,
de amar y ser amado,
respetar y ser respetado,
verás lo que estás viendo,
y sentiras lo que estas sintiendo,
Y doy, el don de la sensatez,
parar cuando hay que parar,
caminar cuando hay camino
para conseguir la inmensidad
de reparar lo irreparable, sino,
de la forma más amable.
Y doy, el don del placer
para conseguir el punto “G”
para abatir los deseos,
para provocar mojados sueños,
para embriagar los sentidos,
y saber cuándo te doy mimos.
¡Y doy! o pídeme
que entre los dos amaremos,
que aun teniendo el don,
yo solo no puedo,
que el arte de amar,
!lo haremos los dos!
Wicttor